FUNDACIÓN HOMBRES Y MUJERES DE FUTURO
Guía de predicación - Julio 28 a agosto 2 – 2025

 

JUBILEO 2025
“Camino de Purificación – Novenario Jubilar”
 Quinto tema

 

LOGRANDO EL DON DE LA LIBERTAD INTERIOR

El señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? (Sal 27)

Objetivo

Desarrollar una mayor conciencia del don de la libertad interior que todos poseemos y proporcionar herramientas para ponerla en práctica.

¿Qué es la libertad interior?

Consideramos esencial que cada creyente descubra que, así esté pasando por las circunstancias más difíciles, dispone de un espacio interior que nadie podrá arrebatarle, porque Dios es su fuente y su garantía. Debemos aprender a desarrollar dentro de nosotros este espacio de libertad y entonces llegarán cosas que nos harán sufrir, pero ninguna nos hundirá, ninguna nos derribará, por dura que sea, nada nos quitará la esperanza.

¿Cómo se logra ese preciado espacio de la libertad interior?

Para el hombre moderno ser libre casi siempre significa poder deshacerse de todo compromiso y autoridad y hacer lo que le venga en gana; esto es, vivir sin Dios ni ley. Pero para el cristiano, por el contrario, la libertad solo se puede hallar mediante la dependencia de Dios, porque la auténtica libertad es un don de Dios, no es una conquista del ser humano. Esa libertad es un fruto del Espíritu Santo que brota en la medida en que nos situemos en una amorosísima dependencia frente a nuestro creador y Salvador. Es decir, nuestra libertad interior es absolutamente proporcional al amor y a la confianza que nos una a nuestro Padre del cielo.

En el mundo, la noción de libertad está considerada como una realidad exterior que depende totalmente de las circunstancias, y no de una realidad ante todo interior. Pues es algo muy obvio para quienes trabajan la libertad interior, que cuanto más dependa nuestra sensación de libertad de las circunstancias externas, mayor será la evidencia de que todavía no somos verdaderamente libres.

Un ejemplo que nos puede ayudar mucho es el de una persona presa de su libertad, que por gracia de Dios se convierte y comienza a creer y a esperar en el Señor. Sabemos de personas que han encontrado su libertad interior al encarnar los valores del cristianismo, la oración y la presencia de Dios en su interior. Estas personas descubrirán una felicidad y una libertad que nadie les podrá arrebatar. Este es el testimonio de un preso que vivió la experiencia de encontrar su libertad interior: “Vivo en una celda, sin embargo, la vida me parece hermosa, me siento libre, dentro de mí el cielo se despliega tan grande como lo es el firmamento”.

Apegos que nos esclavizan

Todo ser humano necesita apoyos y seguridades para desenvolverse en la vida diaria; sin embargo, nos aferramos de manera equivocada a cosas o a personas porque pensamos que ahí está nuestra seguridad, el dinero, el poder, las posesiones, títulos, el éxito, etc.

Los apegos son adhesiones emocionales que establecemos con algo o alguien de manera intensa convirtiéndose en un tremendo obstáculo para nuestro crecimiento espiritual y nuestra libertad interior, ya que generan dependencia y mucho sufrimiento.

Los apegos pueden ser un obstáculo para la relación con Dios y la búsqueda de la perfección, ya que nos lleva a buscar la felicidad en cosas materiales en lugar de en Dios.

El Señor en su Palabra nos invita a fiarnos totalmente de Él a no poner nuestras seguridades en nada ni en nadie más.

Confía en Yahvé de todo corazón
y no te fíes de tu inteligencia; reconócelo en todos tus caminos
y él enderezará tus sendas (Pr 3,5-6)

Fiarse de Dios significa, apoyarse, depender, y confiar enteramente de Él sin ninguna reserva ni duda.

El señor es claro y contundente en este tema: El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí.

Taller

-       La libertad interior se da en la medida en que tú dependas de Dios y no de tus fuerzas, tus conocimientos o capacidades ¿Has experimentado esta dependencia?

-       ¿Qué crees que puedes hacer para desarrollar este gran don de la libertad interior?

-       En un rato de oración y reflexión pídele al Señor que te muestre tus apegos, escríbelos en una hoja de papel y entrégale al Señor las dificultades que tienes para soltar esas adherencias emocionales que te están quitando libertad interior e impidiendo una perfecta comunión con Él

 

Textos de apoyo

(Pr 3,5) (Sal 31,6) (Sab 17,11)